Sábado en la tarde

Hace mucho tiempo que no hablaba con mi papá, pero no de "esas conversaciones".
Se agradece que haya subido a la sala de estar, solamente para estar ahí, mientras nosotros, Simón y yo, estabamos en lo nuestro.
Empezó a conversarnos, había olvídalo que me da mucha risa las cosas que dice y como las dice, cuando habla no puedo dejar de sonreír.
Me comentó varias cosas, empezó a divagar sobre como hacían los moldes de cosas plásticas y mientras le prestaba toda mi atención.
Así pasó el tiempo, hasta que sonó su celular (el es del tipo de personas que vive hablando por teléfono). Pero conseguí una invitacion.